La rubia con orígenes rumanos más deseada y envidiada de España, Elsa Pataky, está hecha a remiendos. O al menos eso da a entender la revista “Qué me dices”, la cual ha hecho un exhaustivo estudio sobre el antes y el después del físico de la actriz, así como el precio que le ha supuesto cada parche.
Al parecer, su primer paso por el quirófano fue para retocarse la pinocha: “No le gustaba su nariz”, cuenta María José Barba, la experta en cirugía estética.
Luego vendrían la liposucción de mejillas, resaltación de pómulos, delineación y aumento de los labios faciales, blanqueamiento de dientes para lucir una piñata reluciente, mamoplastia de aumento y lipoescultura en nalgas y piernas para evitar la celulitis.
También resalta la doctora: “No lleva prótesis en el culo porque lo tiene ligeramente caído, aunque apenas se la nota”.
En total, la inversión en belleza corporal le ha salido por 31.000 euros, aunque ella se empeña en asegurar que toda su anatomía es natural.
¿A quién querrá engañar?